Lo primero que llama la atención es que, por fin, los clubs ya no necesitan de los traspasos para poder cubrir sus gastos. El resultado antes de traspasos es positivo, el 3% en relación a los ingresos ordinarios o importe neto de la cifra de negocios.
El resultado final, despues de todos los ingresos y todos gastos es también positivo: el 8% sobre cifra de negocios, eso sí, despues de tener que acudir a trapasos para poder obtener esos beneficios.
El beneficio obtenido por los trapasos equivale a un 17% de la cifra de negocios. Es decir, además de unos ingresos ordinarios que hacemos igual a 100 hay que añadir 17 para poder cubrir todos los gastos y poder obtener un beneficio final de 8.
¿Como lo hace el MCF? Pues mejor que sus competidores. Hasta el resultado antes de traspasos la estructura es parecida, obteniendo un resultado de +4% frente al +3% de la "Liga-18". Pero, si nos fijamos, podemos ver como el Málaga no ha necesitado en la temporada 2016-17 realizar traspasos para obtener un resultado despues de impuestos positivo. En cambio, la "Liga-18" sí necesita traspasos para obtener el beneficio final: sin el 17% de los beneficios por traspasos la cuenta de resultados hubiera presentado perdidas por -9% (8-17=-9 ) en vez de +8%.
Una medida de prudencia reconocida internacionalmente, para garantizar la viabilidad económica de los clubs, es la de que el coste de la plantilla no supere el 70% de los ingresos ordinarios o cifra de negocios.
El coste de la plantilla suma a los gastos de personal directos (sueldos y demás) el importe de la amortizacion anual por los fichajes realizados (si compro por 6 mill. a un jugador con un contrato de 3 años, supone un coste anual por amortización de 2 mill.).
Vemos como la "Liga-18" pudo en la temporada 2015-16 quedar por debajo del mencionado 70%: en el 69%.
Vemos igualmente como el comportamiento del Málaga, otra vez, es mejor que el de sus competidores: 61% vs 69%
La radical mejora de la situación económica de los clubs en los últimos años.
Gracias, primero, a la implantación de medidas de control como el tope salarial y, en los últimos años, al incremento de los derechos de televisión por su venta centralizada, los clubs de futbol pueden presentar cuentas de resultados comparables a las de cualquier empresa normal. Fijense en la temporada 2011-12, la más antigua que presenta la LFP en su Informe Económico:
Hasta hace pocos pocos años, los clubs gastaban en sus plantillas prácticamente lo mismo que eran capaces de ingresar de forma ordinaria y recurrente (96 vs 100). Algo imposible de mantener en el tiempo. Y a todas luces casi una locura.
Antes de tener que acudir a traspasar jugadores para intentar equilibrar ingresos y gastos las pérdidas equivalían al 29% de la cifra de negocios.
A pesar del 15% de los beneficios por traspasos, el resultado final era todavía de pérdidas (-6%).
Distribución de los ingresos ordinarios.
Para finalizar, dejo la distribución porcentual del importe neto de la cifra de negocios.
En el caso del Málaga, es triste comprobar esa dependencia en un 78% de los ingresos por televisión.
En resumen, la economía de los clubs de futbol ha mejorado muchísimo en los últimos años. Y los mayores ingresos generados por la televisión y su reparto centralizado han convertido a los clubs en autenticas grandes empresas, que debemos exigir que sean gestionadas con criterios de capacidad y competencia profesional y no por amigismos y compadreo con los amigos de turno.
Dejo aquí los enlaces a las entradas publicadas a partir del Informe Económico de la LFP:
1. Introducción (22-dic-2017)
2. El balance (23-dic-2017)
3. El inmovilizado (26-dic-2017)
4. Sobre la deuda y el fondo de maniobra (11-ene-2017)
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