Además de la sorpresa comentada en la entrada anterior sobre Ndiaye, algunos comentarios adicionales pueden ser los siguientes:
- El análisis de estados financieros no es solo un
ejercicio teórico, se realiza con una finalidad, casi siempre intentado
pronosticar un futuro próximo a la vista de la evolución del pasado reciente.
- En el caso del futbol español (no así en el resto de
países) la existencia del control económico a priori y la publicación de los
topes salariales nos permite anticipar el futuro sin necesidad de realizar cálculos
complejos más propios de expertos que de simples aficionados al futbol.
- Como a todas las empresas, autónomos, profesionales,
familias y gobiernos, el Covid ha supuesto para los clubs de futbol un antes y
un después. Ajustar los gastos a los ingresos es una tarea prácticamente
imposible para una mayoría de sectores, sobre todo porque en bastantes casos es
que ahora ni siquiera hay ingresos.
- Una gestión irresponsable de los gestores (en plural:
gestores) del Málaga en el verano de 2018, tras el descenso, nos condenaba
inexorablemente a un verano de 2019 imposible de manejar. Los gestores, con el
apoyo ciego del entorno malaguista, consiguieron desviar su responsabilidad
hacia la propiedad, por supuesto igualmente responsable del caos.
- La consecuencia del verano de 2019 fue el ridículo del
cierre de mercado (con varios jugadores sin poder ser inscritos) y la pesadilla
de la temporada 2019-20 salvada gracias única y exclusivamente a los
profesionales DEPORTIVOS del club. En febrero se nos apareció la Virgen, el
club fue intervenido y se empezaron a tomar medidas inevitables pero totalmente
razonables y razonadas.
- Tras el Covid, este verano, todos los clubs se han visto
con graves problemas de tesorería. Desde los más pequeños hasta los más grandes.
Y la mayoría comenzaron la temporada con gastos comprometidos imposibles de
cumplir por la falta de ingresos. Por la falta de ingresos recurrentes durante
la competición y por la paralización del mercado de traspasos en el verano. Es
decir, el futbol español se ve ahora como el Málaga se vio la temporada pasada
(incapaz de ajustar gastos a ingresos).
- La conclusión del párrafo anterior cae por su propio peso
y es especialmente positiva para el Málaga actual: lleva un año de ventaja al
resto de clubs del futbol español.
- Si a este ajuste de ingresos y gastos unimos el dato
objetivo de que el Málaga no tenía un problema adicional de deuda acumulada
podemos afirmar de que, si conseguimos la permanencia, realmente estamos ante
un proyecto que empieza de cero. Esto no es ni bueno ni malo. Si a un proyecto
que empieza de cero le metemos otra vez a Husillos y José Gonzales, jaleados por sus
amigos periodistas, pues nos vamos a 2ª B. Si a un proyecto que empieza de cero
lo dejamos en manos de Pellicer, Gaspar y José María Muñoz pues podemos
ilusionarnos con el ascenso.
Vamos con algunos datos:
- Este año el Málaga presenta Deuda Neta negativa según los
cálculos impuestos por La Liga, es decir, si a la deuda le restamos lo que
tenemos en caja y lo que vamos a cobrar a corto plazo el saldo es negativo.
No me gusta el concepto de deuda neta, e incluso la propia
definición de "deuda" es discutible. Pero es lo que hay. Las reglas
son las mismas para todos así que podemos sacar pecho y gritar: "el Málaga
no tiene deuda".
- El Málaga ahora mismo no tiene ningún gasto por
amortización de jugadores. El resto que quedaba lo ha dotado antes de 30 de
junio. Esto significa que dentro del tope salarial no hay amortizaciones de
jugadores. Y también significa que toda venta que se pueda realizar será
beneficio en el futuro.
- ¿Cómo es posible que en el presupuesto de 2020-21 figuren
6,3 millones de gastos de plantilla deportiva cuando el tope salarial es de 3,6
millones? Pues porque en los 6,3 millones están incluidos los costes de julio,
agosto y septiembre, fecha de cierre del ERE a los jugadores.
- Por supuesto, no todo es de color de rosa. El Málaga tiene
presupuestados beneficios por la venta de jugadores por 3,3 millones. Y unas
pérdidas de 2,3 mill.
- Termino con las pérdidas de 2020. Porque como nuestro
"entorno" solo se fija en las cosas malas, se van a fijar en esto.
Pues bien, en este cuadro están los beneficios y pérdidas de los últimos años:
- NO SE PUEDEN TENER GASTOS DE PRIMERA DIVISION CON INGRESOS DE SEGUNDA DIVISION. Esta es la razón de las pérdidas en 2020. De no haber sido por la Ayuda al descenso (20,1 millones) el Málaga también habría tenido pérdidas de 10 millones la temporada anterior. En la próxima entrada veremos los datos.
- Se ha publicado que el Málaga ha obtenido un crédito para
tesorería por 5 millones a un plazo de 5 años. Esta ha sido una operación de La
Liga a la que se han acogido once clubs, nueve de 2ª y dos recién ascendidos a
1ª. Es decir, no ha sido ningún favor al Málaga. Lo digo porque nuevamente
aquí, en nuestra ciudad, se dirá que el Málaga ha sobrevivido gracias a Tebas.
Siempre lo malo para el Málaga y lo bueno para otros. Siempre anticipando el
desastre. Disfrutan con ello. Viven de ello.
En resumen, si la pelotita entra podemos tener una próxima
temporada ilusionante, incluso esta misma temporada. Y si la pelotita en vez de
dar en los postes en los play off con el Depor hubiera entrado en la portería
la historia hubiera sido diferente. Y si en vez del jeque tenemos a cualquier
otro dueño que hubiera despedido fulminantemente a Michel en el verano de 2017
por sus reiteradas declaraciones improcedentes, pues igual seguíamos en
Primera. Y si en octubre de 2017 el jeque y sus consejeros hubieran fichado a un director deportivo y no a un amigo que ya había
fracasado, pues igual hubiéramos remontado. En definitiva, nuestra historia la
escribimos nosotros. Desgraciadamente, en lo futbolístico, Málaga no da la
talla. Casi siempre hemos sido de segunda y en ella estamos.