martes, 16 de febrero de 2016

MCF-4. Buscando algunos millones


¿Cómo es posible que con tantos traspasos en la temporada 2014-15 tuviéramos prácticamente la misma deuda que un año antes a 30 de junio?

Pensando en esta pregunta he comprobado el presupuesto aprobado para la temporada 2014-15 con los importes realmente obtenidos. El resultado está más abajo.

Un presupuesto de un equipo de futbol es relativamente fácil de preparar. Ya quisieran todos los negocios tener la certeza de ingresos y gastos que tienen los clubs de futbol.

Para mayor precisión todavía, el presupuesto de la temporada 2014-15 incluido en las cuentas anuales está fechado el 30 de septiembre de 2014, con la competición comenzada y el mercado de fichajes cerrado.

Es decir, lo único no previsible (los traspasos) ya estaba bastante acotado a 30 de septiembre.

La respuesta intuitiva a la pregunta inicial es evidente: si hay mayores ingresos y la deuda es la misma, el dinero ha tenido que ir a mayores gastos. Vamos a comprobarlo.

En el cuadro siguiente presentamos, en la parte de la izquierda, el presupuesto de la temporada anterior con la realidad conseguida. En la parte de la derecha vemos las desviaciones presupuestarios y las clasificamos en mejores que las previstas (positivas) y peores que las previstas (negativas)




Empezando por el final, el Málaga ha tenido un beneficio, no esperado, de 3,7 mill. 

Este beneficio ha sido posible gracias a las ganancias obtenidas en los traspasos. Un total de 16,6  mill. frente a los 5,8 mill. obtenidos hasta el 30 de septiembre (fecha del presupuesto).

Pero este mayor beneficio no esperado en traspasos de 10,8 mill. no ha ido íntegramente a beneficio final.  Una parte importante se ha destinado a mayores gastos no presupuestados.

Los principales mayores gastos no presupuestados han sido gasto en personal no deportivo (3,3 mill.) y otros gastos ordinarios de explotación no identificados con mayor detalle (5,7 mill.)

Además de la evidente sorpresa por el incremento en los salarios de los directivos, sobre todo en una época de ajuste salarial de la plantilla, llama la atención la incapacidad de los anteriores gestores para estimar los gastos de funcionamiento del club, con una desviación casi del 40%, un porcentaje sin duda muy elevado.