viernes, 4 de septiembre de 2020

La crisis del futbol. La necesidad de los traspasos para su sostenibilidad

La crisis del Covid-19 va a destrozar a muchas familias, empresas y países. En el mundo de las finanzas y las empresas creo que se van a romper también algunas ideas que estaban bastante arraigadas. Por ejemplo, muchas de las relativas a las ventajas del endeudamiento. La liquidez pasa a ser un valor fundamental. Incluso me atrevería a decir que la liquidez ahora es más importante que la solvencia. Porque la solvencia hay que demostrarla frente a terceros pero la liquidez está en el bolsillo.

En el brillante mundo del futbol también se habla sin tapujos de crisis. Tanto equipos de los más grandes como de los modestos han reconocido públicamente problemas financieros. Recientemente se ha publicado que 34 de los 42 equipos de la Liga de Futbol Profesional superan los límites salariales inicialmente fijados.

Gracias a los datos aportados por Palco 23 en su Guía Económica de 2020 he preparado estos cuadros para comprobar que son los resultados extraordinarios, las plusvalías obtenidas por los traspasos,  los que permiten el equilibrio económico de los clubs. En la última temporada con datos publicados, solo cuatro equipos de Primera División hubieran obtenido beneficios sin acudir a traspasos.

 

Se observan  en el cuadro las enormes pérdidas que bastantes clubs hubieran tenido de no haber realizado ventas de jugadores. Solo cuatro equipo, y los cuatro "pequeños" mantuvieron el equilibrio económico sin acudir a traspasos.

Los datos en la Segunda División son sustancialmente más modestos, pero se ve igualmente la dependencia de los traspasos para poder equilibrar las cuentas anuales.


 


Cuando se ha paralizado el mercado de fichajes ha quedado en evidencia que los clubs de futbol viven por encima de sus posibilidades. Que aunque presenten beneficios estos dependen de unos ingresos que no son recurrentes ni precibles. Más bien podriamos decir que son ingresos un tanto aleatorios.

Frente al dato positivo de los beneficios finales en los últimos ocho años, llama la atención que en  los 20 años analizados por el CSD se ha necesitado acudir a traspasos, que son resultados extraordinarios en el negocio del futbol, para "maquillar" los resultados finales.

Resulta muy preocupante el incremento en los resultados extraordinarios en las dos últimas temporadas, justamente cuando los ingresos por televisión, por taquillas y abonados y por publicidad y comercialización han alcanzado las cifras más altas de la historia. No se están utilizando los mayores ingresos de la historia para, por ejemplo, reducir deuda. O acumular liquidez para años malos, como cuando se desciende o sobreviene una crisis como la actual.

Cuando se ha paralizado el mercado de fichajes ha quedado en evidencia que los clubs de futbol viven por encima de sus posibilidades.

Parece que también en el sector del futbol las cosas habrá que hacerlas mejor y de forma diferente a partir de ahora.